viernes, 12 de octubre de 2012

Mujer de Arcilla Lava


Piel bronce y ancestral
¿qué tienen tu piel y tus lineas
que desbordan mis ríos y se llenan de la arcilla de tu inmenso y lejano volcán?
Te he visto en tantos rostros
lejanos a mis raíces,
te he sentido hoy a mi lado
palpando el café de tus matices.
No es ilusión ni amor lleno de afán
pues sigues siendo princesa, mirada oscura de venado,
callada en sus tormentas de lluvia negra
donde mi bote simple ha encayado.
En tus tierras, tierras de barro
burbujea la lava humeante de tus gruesos labios
que incitan mis deseos de amarte como humano.
¡Cuánto daría por ascender hacia la cima
desde estos bosques, donde se aprecian tus senos de barro!
Y sé que tu lava hirviente y fina de arcilla negra,
hasta mis huesos menudos de amor calcinados,
me envuelve con tu aliento
de india pura y ojos de nácar
cual infierno de llamas rojas,
voluptuosas caderas de fuego en mi alma.
Se secan mis praderas
y mis bosques verdes y mis años,
cuando tu lava desciende desde el cerro de tus manos;
y me derrito y muero lentamente
con tu arcilla de fuego, beso fugaz y ajeno.
Dulce piel bronce y ancestral
¿qué tienen tu piel y tus lineas
que desbordan mis ríos y se llenan de la arcilla
de tu inmenso y lejano volcán?