martes, 25 de octubre de 2011

Descansos líquidos



Me anestecio de las horas

cuando la noche nace entre las luces citadinas,

los humos y bullicios del tráfico intermitente.

Me caliento el cuerpo (cosa natural)

de las horas solitarias y de los recuerdos tardíos.

Me erotizo con los espíritus de la caña,

de la malta o del ágave calcinante,

que hechizan los entornos y

convierten los silencios en arte.

Soy pintor de mil años por un instante

rodeado de famas y candilejas,

de chispas de cigarrillos y voces lejanas quietas.

Me fascina el vidrio que captura

la esencia etílica y dulce

de mis años perdidos

y mil veces orinados en espuma de neuronas.

Se me sensibiliza la lengua

y la líbido y beso en silencio a la hermosa soledad,

que me irrespeta con su presencia

con los errados chismes de mi pasado.

Me consuela el Rock nostálgico

que se escapa de la bocina retumbante

y que me recuerda las horas moribundas

de la señora realidad que descansa.

Y la vida empezó y terminó en un instante,

entre la tarde y la noche, entre la bulla ya somnolienta,

entre las horas y las monedas restantes y ahorradas

con las que ofrendo el pago por la velada.

¡Vaya qué pequeña odisea tan relajante!


Me duermo por llegar en el bus de la vida

al lugar donde ahora reposo y se calma mi alma;

otro día en que la ropa vieja se cambia

y se atemperan las ansias.

Existencia

Corta, sagaz, efímera, pasajera. Así es la existencia.
Un día para llorar y otro para alegrarse;
un día para celebrar y otro para comulgar con la paz.
La verdadera sabiduría es el temor de DIOS,
pero no malgastes toda tu vida siendo solamente sabio,
porque bajo el sol también lo mucho de lo mismo contristece el espíritu.

lunes, 3 de octubre de 2011

Cielos de Concreto



Aquí no vuela ave o paloma

Ni hay ninguna mariposa de caoba

Entre los sucios barrotes de oscuridad.


Bajo de mí hay frío, mucho frío

Entre ratones flacos y el sonido

De gotas secas verdes de humedad.


¿Quién cantará sin cielo azul brillar

o siente algo de pasto al caminar?

¿Alguno por mí siente algún respeto

entre estos grises cielos de concreto?


La oscuridad se vuelve eternidad

De hierro crudo es ya mi otra mitad

y canto para no llorar un año más.


Mi pensamiento es una ilusión

Con cada herida pido yo perdón

Pero la noche es negra y tiene mal olor.


¿Quién cantará sin cielo azul brillar

o siente algo de pasto al caminar?

¿Alguno por mí siente respeto

entre estos grises cielos de concreto?


Mi piel ha envejecido y rota está

Un día nuevo pronto llegará

Mas aquí no queda nada...

Ha muerto con la libertad.


Versión original del autor.

Sapiencia o hacerse viejo


Tiempo ladronzuelo, juguetón siniestro
que le robas al rico y al pobre cada día, algo de vida:
Me he quedado simplemente callado
cuando fui testigo de tus actos sutiles,
pues he aceptado tus travesuras juveniles.
Antes te huía en cada esquina de mis actos inpunes,
mas ahora soy persecutor de tus huellas y sombras.
Aún joven y sigiloso me muestro admirador
de lo que siempre sabes callar
y con esperanza espero tus palabras atinadas.
Conoces el secreto de mis años
que desde siempre me has robado;
conozco hacia donde me llevas a descansar,
pero no me dices cuánto aún falta más.
Ayer imité tus letras y quise pensar como tú,
pero mi mente desgastada te perdió en la esquina
de la duda o la patética profesía.
Tus dedos esculpen las lineas de mi cara cuando duermo
y llenas de estrellas las mentes del viejo.
Mercadeas mi alegría por cansancio
con descuento de preocupaciones necias.
Sigues siendo un pillo a pesar de mi amistad,
porque tu cleptomanía no tiene cura;
sigues a la fecha robando vidas
y regalando al que la quiere por limosna,
tus hermosas lecciones silenciosas de sabiduría.

jueves, 23 de junio de 2011

Inquisición



Llora siempre, mundo llora por la fe de los penitentes.

Por los que partieron desde la celda de la calumnia y hasta el trono del Satán vivo llamado Rey Cordero.

Llora siempre, mundo llora por los verdaderos creyentes,

del Dios de Amor y Paz, del Dios bueno una vez bajado del cielo, que siendo inmolado, fue le primero.

Mataron el cuerpo pero no nuestro buen deseo

de no negar al Cristo Amado y Dios verdadero.

El Rey Carmesí que vino a quemar la fe del inocente, del bueno, creyéndose más fuerte y santo que el trueno

y que sigue escondido tras las columnas del marmol

donde está su reino.

Llora siempre, mundo llora al recuerdo

de jovenes niñas tituladas amigas del gato negro

llevadas desnudas al matadero, donde los esbirros

corruptos tocaban sus senos antes de morir

tribuladas al fuego.

Ríe mundo ríe, porque todos éstos son ahora

ángeles en vuelo, que glorifican al Padre allá en lo alto,

allá en el cielo: por su callo sacrificio

en un mundo cruel y verdadero.

Llora pueblo santo, llora;

ora incansable hoy al recuerdo

para que la religión pronto sea un monstruo muerto

antes de la venida del verdadero Cordero.

Medita mundo un momento que a mis lineas quiero

dejar inherentes todo mi sentimiento.


México, 1492.

Falsa libertad cotidiana

Estoy bajo un velo.
Por más que quiera, no puedo ver el azul del cielo
aunque repose en la verde pradera de la libertad.
Quisiera que fuera una ilusión
más que una fría realidad
que me causa estorbo, pena y conmoción
de verme desnudo ante las almas y los santos.
Quebré con mis manos resbaladizas
la copa virgen de la confianza
y se esparció por el suelo el vino de la esperanza.
Ya ni las aves rondan ni emiten sus cantos,
no las veo pues estoy bajo velo.
Desde mi pradera hay un solo camino directo
que me lleva como manso cordero...
al matadero.
Porque aún sé que nadie es perfecto,
aún ni del disparador más certero
que escondido apunta mi cabeza
y que desea verme en el suelo.
Deseo que todo esto sea un sueño
porque de no respirar ya casi muero
y de frío y de hambre
bajo el velo.

martes, 3 de mayo de 2011

Voces del final

La prosperidad un día llegó
en medio de tus penalidades consecuentes;
y fue difícil discernir al cielo,
entre el perdón y la última gracia
de Su gran misericordia.
Ayer soñáste sobre horas y minutos claros,
hoy sigues pensando sobre voces del final.
"La vida es como una vela
en medio de un abierto estadio":
sobrio pensamiento de tu existencia
y haces fila con miles que aún no saben
cuando van a morir...
El miedo es humano porque duele en la carne,
la anestesia espiritual porque se inyecta en el alma.
¿Podrá Dios decirme la fecha exacta,
la hora y el día para oficilizar esta despedida?
Pesa la conciencia necia
ante el regaño del dominio propio
que ascético se inmola
y sangrando suplica a lo alto:
¡Sólo dime mi Dios...cuándo!